Guzmán Garmendia Pérez
CIO de Comunidad Foral de Navarra

¿Qué retos y oportunidades enfrenta la Comunidad Foral de Navarra?

Navarra se ha propuesto -y está en la senda- construir un territorio con sólidas infraestructuras digitales, una población capacitada en materia tecnológica y con proyectos IT multidisciplinares, en este último punto poniendo el foco especialmente acciones en aquellas materias en las que la Comunidad Foral ya es diferenciador, como es la automoción, las energías renovables, la agroindustria, la educación y la medicina, lo que implica una transformación de la administración, empresas, personas de todas las demás instituciones y organismos que componen Navarra. El Gobierno, y por tanto la administración, debe ser el catalizador de este cambio, logrando en el menor tiempo posible que la sociedad y la administración sean 100% digitales y conectadas. Para ello hemos elaborado tres documentos base para esta transformación, que se fundamentan en tres pilares: Conectividad, Capacitación y Desarrollo. Los títulos de estos tres planes hablan por sí mismo y están disponibles para toda la población de forma abierta en castellano, euskera e inglés: Plan de Banda Ancha, Plan de Capacitación e Inclusión Digital y Estrategia Digital Navarra 2030. Serán nuestras guías en los próximos años, y estamos abiertos a que se complementen, se adopten y, por su puesto, que se evolucionen.

El Gobierno, y por tanto la administración, debe ser el catalizador de este cambio, logrando en el menor tiempo posible que la sociedad y la administración sean 100% digitales y conectadas.

¿Puede describir brevemente sus responsabilidades en el Gobierno de Navarra?

La Comunidad Foral de Navarra es una ‘rara avis’ dentro las Direcciones Generales del resto de Comunidades de España encargadas de las Telecomunicaciones y de la Digitalización. No se trata ser mejor o peor, pero aquí hace años se decidió unificar todas las competencias en una sola Dirección General, que es la que ahora tengo el orgullo de ocupar. Todas las responsabilidades de Telecomunicaciones, Digitalización, Informática y Tecnología, salvo las del área de Educación que se escindió hace unos años por un problema interno, recaen en mi equipo. De esta forma, además de un área jurídica y otra económica, dispongo de cinco servicios que se encargan de las Infraestructuras, de Salud, de Hacienda y Administración Electrónica, del resto de Departamentos y de Avance Digital, que es nueva e incluye Ingeniería de Datos, Inclusión y los portales del Gobierno. Además, disponemos de dos empresas públicas muy ligadas a mi equipo que nos apoyan en desarrollo, cuestión que recae en TRACASA, y en Infraestructuras, que lidera NASERTIC.

En definitiva, una Dirección General amplia, con muchas competencias, y que centraliza la labor TIC de todo el Gobierno, lo que aporta sinergias en contratación, compra, licencias, herramientas y demás recursos, aunque en ocasiones genera un maremágnum no fácil de gestionar.

¿Cuáles son las prioridades en su presupuesto TIC para este año?

El presupuesto 2021 está prácticamente cumplido, y era un presupuesto de supervivencia muy orientado al momento de pandemia en el que estábamos inmersos y en el que seguimos. En 2022 estamos buscando otro enfoque a la espera de la llegada de los Fondos Europeos, que hablan de un 30% para digitalización, y que podrían multiplicar nuestra capacidad financiera, un reto enorme al que nos enfrentamos todos los que estamos al frente de la gestión en puestos similares al mío.

2022 se presenta ilusionante, pero duro y complicado. La parte presupuestaria de asistencia técnicas, apoyo externo e innovación debe crecer, y mucho, y es que sin las empresas no podremos abordar con éxito la exigencia europea de inversión de los próximos dos años, que son, realmente, una oportunidad enorme que hay que saber afrontar. Necesitamos la colaboración público-privada real, en forma de consorcios, acuerdos o contratación regular, pero tenemos que trabajar codo con codo para no ‘gastar’, más bien para invertir, e invertir en proyectos sólidos, duraderos, que se asienten en el terreno y adapten el terreno a la era digital que debe asegurar el crecimiento económico, empresarial, social y de empleo de las próximas décadas.

2022 se presenta ilusionante, pero duro y complicado. La parte presupuestaria de asistencia técnicas, apoyo externo e innovación debe crecer, y mucho, y es que sin las empresas no podremos abordar con éxito la exigencia europea de inversión de los próximos dos años

¿Es la seguridad una de sus principales preocupaciones? ¿qué medidas está tomando para controlar esa amenaza?

En la seguridad nosotros bien: ni somos los mejores, ni estamos mal. Discretamente trabajamos y tengo que decir que tengo al frente de la Ciberseguridad unas personas que son la verdadera garantía de nuestra administración. Nos preocupa, mucho, y nos ocupa, mucho también. El estrés de las Telecomuniciones y de las herramientas tecnológicas durante la pandemia han aumentado las brechas de seguridad, y ahí estamos alerta, con profesionalidad e, insisto, con unos perfiles de los que no puedo estar más orgulloso.

¿Cuál es el ROL que debe de tener en su opinión un CIO?

Un CIO debe estar a la altura del CEO si hablamos en términos de empresas. En la administración, y es algo que no pasa, el CIO debería estar en todos los órganos de decisión, ya que a veces nos vienen las decisiones dadas y muchas veces son ciencia ficción. Durante la pandemia se han dado cuenta de esto, y, por ejemplo, a mi Dirección general se le declaró ‘esencial’, lo que nos ha permitido contratar y movernos con mucha agilidad. Somos esenciales en pandemia y fuera de ella, es una realidad y acabará imponiéndose, diluyéndose la figura del CEO y del CIO, llegaremos, por tanto, a ver Consejeros de Digitalización, una posición muy justificada y necesaria.

Somos esenciales en pandemia y fuera de ella, es una realidad y acabará imponiéndose, diluyéndose la figura del CEO y del CIO, llegaremos, por tanto, a ver Consejeros de Digitalización, una posición muy justificada y necesaria.

Hay una serie de tecnologías de las que se habla constantemente: Cloud, Inteligencia artificial (IA), Blockchain, IoT, Robotización y Automatización de Procesos (RPA), entre otras.
¿Qué planes tiene su ADMINISTRACIÓN con respecto a estas tecnologías?

Muchas veces hablamos de estas tecnologías como nuevas y llevamos lustros trabajando en ellas. IoT, por ejemplo, está muy consolidado en algunos ámbitos, aunque no lo veamos como tal, y hablando de áreas de mi responsabilidad, lo veo en Policía Foral, 112, Bomberos y otros departamentos. Lo mismo con Cloud, que en realidad ya está presente, así como RPA. Todo está iniciado, falta adoptarlo con valentía, en ello estamos. En mi administración queremos priorizar RPA, IA y Cloud, lo que significa que vamos a ir a por ello con valentía, ganas, proyecto, estrategia y, por supuesto, inversión.

¿La inversión en las mismas es una prioridad presupuestaria en estos momentos?

La inversión en Green Cloud Híbrida es una prioridad, lo podéis consultar en el documento de Estrategia Digital Navarra 2030 del que hablábamos antes. Navarra tiene que actualizar sus CPDs, o al menos reubicar, y estamos viendo que además una demanda interesante desde el sector privado foral lo que nos lleva a pensar en construir algo grande y cederlo en explotación aprovechando la construcción del Hub de Innovación Digital que está proponiendo el Gobierno de Navarra. Por otra parte, el proyecto de RPA que pretendemos lanzar es importante, pero necesitamos el patrocinio del resto de consejerías, que en realidad son los que nos demandan las acciones para que nosotros actuemos. Por último, y por centrarnos solo en los puntos que preguntas, la Inteligencia Artificial debe ser protagonista y lo será. Estamos trabajando con la Universidad Pública de Navarra para posicionar nuestra comunidad al frente de la IA Internacional, aprovechando que fuimos los primeros en tener una carrera de ciencia de datos, además de la cátedra de IA en la que tanto nos apoyamos. Hay mucho que hacer, y estamos inmersos en alguna prueba de detección de movimiento en carreteras, aforos o prevención del fraude, que no son más que el nicho de lo mucho que vendrá.

Usted que es uno de los “CIOs” más relevantes. Desde sus años de experiencia en el sector TIC en nuestro país ¿qué consejo puede dar desde el punto de vista estratégico?

Insisto: el CEO debe estar a la altura del CIO. Esa es la clave, y cada vez se está viendo con más intensidad. Antes éramos los últimos enterarnos, os trataban caso como ‘los de los cables’, y hoy se han dado cuenta que somos esenciales. Lo somos y lo seremos más, con lo que el poder se debe ver reflejado en el organigrama.

¿Tiene su área de negocio algún plan específico para impulsar la incorporación de la mujer con formación STEM?

Sí. Es fundamental. Lo tenemos muy presente en dos de los tres planes que forman los pilares de nuestro funcionamiento para los próximos años y que comentaba al principio de la entrevista. Tanto en el Plan de Inclusión y Capacitación Digital, como en la Estrategia Digital Navarra 2030, tenemos muy presente la incorporación y crecimiento de la presencia de las mujeres en materia STEM. No solo es cuestión de mencionarlo, en ambos casos nos marcamos objetivos numéricos para 2025 y para 2030, incluyendo el porcentaje de mujeres en carreras STEM de nuestra Universidad Pública. Es un tema muy relevante, serio y que marcará nuestras prioridades a corto y medio plazo.

¿Cómo afronta la llegada de los Fondos Europeos?

Afrontamos la llegada de los Fondos Europeos como una enorme oportunidad. Tenemos que ser conscientes de lo que significa y, sobre todo, para qué han sido concebidos. Nos negamos a repartir ayudas de forma atomizada que no llevan a nada, y apostamos por construir infraestructura o desarrollo digital estable y robusto que se asiente en el terreno. Desde el punto de la vista de la gestión, no voy a ocultar mi preocupación, nuestra escasa capacidad de dimensionamiento, así como la demanda (y presión) interna y externa, no van a hacer fácil el reto. No obstante, en la Comunidad Foral de Navarra llevamos un año preparándonos, con planes, estrategias, redacción de proyectos y, sobre todo, con trabajo, con mucho trabajo, por lo que estamos deseando que lleguen y empecemos a afrontar la realidad de la gran ola tecnológica que nos llega y que pensamos surfear de forma magistral.

Nos negamos a repartir ayudas de forma atomizada que no llevan a nada, y apostamos por construir infraestructura o desarrollo digital estable y robusto que se asiente en el terreno.

No lo digo por mí, lo digo por mi equipo, casi 500 profesionales que lo han dado todo en pandemia, que se implican, aportan y trabajan como si se tratara de su propia empresa, que en realidad lo es, es la empresa de todos y de todas. Desde aquí quisiera, una vez más, agradecerles todo lo que han dado y dan cada día a Navarra.