La Administración General del Estado no es un comprador cualquiera: con sus más de 1.200 millones anuales de presupuesto TIC es un cliente de referencia de muchas empresas del sector y por tanto su política de compras tiene un notable efecto sobre la economía nacional.

Hasta ahora las compras se llevaban a cabo de forma distribuida a través de sus 500 organismos públicos y si bien existe una obvia concentración en las grandes unidades TIC de la AGE (AEAT, Seguridad Social, Defensa, Interior, Justicia), la lógica de la licitación pública ha hecho que existan multitud de empresas de pequeño y mediano tamaño aportando valor a la AGE.

La situación va a cambiar como consecuencia del Plan de Digitalización de las Administraciones Públicas 2021-2025 que se espera que coincida con el periodo de vigencia de los fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia previsto en el Real Decreto Ley 36/2020 ante la crisis provocada por el COVID-19.

En efecto, la AGE se dirige hacia un modelo de mayor concentración de servicios TIC en la NubeSARA gestionada por la Secretaría General de Administración Digital (SGAD) que va a asumir funciones tanto de proveedora de infraestructuras en sus Centros de Proceso de Datos de referencia como de proveedora de servicios de soporte para la digitalización de procedimientos administrativos; en un proceso que comenzó con el concurso unificado de comunicaciones de la AGE.

Si analizamos la experiencia de esta licitación en su fase 2 -con un valor estimado del contrato de 378 millones de euros- veremos que provocó una concentración del servicio en tres operadores y que no permitió la adjudicación de partida alguna a PYMEs por los altos importes de sus cuatro lotes.

Si extrapolamos la situación al Plan de Digitalización 2021-2025 y añadimos la presión temporal de ejecución que imponen los fondos MRR, es fácil pronosticar que la SGAD no tiene más alternativa que licitar grandes servicios TIC de uso transversal para toda la AGE, lo que va a provocar una concentración en un pocos ganadores y muchos perdedores, todo ello en un país donde el 99,84% de sus empresas son PYMEs y cuyo sector TIC los constituyen -según el ONTSI– 25.905 empresas. ¿cuántas de ellas van a ser adjudicatarias de contratos TIC de la AGE? Evidentemente, sólo unas pocas.

Ante esta situación es fundamental el papel del tejido asociativo para buscar un esquema de contratación que facilite la igualdad de oportunidades de todas las empresas y que contribuya a mantener el empleo en el sector TIC español; y Autelsi está en una situación excepcional para ayudar en este enfoque puesto que aglutina tanto el lado de la oferta como de la demanda TIC.

La cantidad de estudios, encuestas y análisis de calidad sobre la situación del sector TIC elaborados hasta la fecha por Autelsi y la presencia en sus múltiples grupos de trabajo de los tres niveles administrativos son un magnífico aval para poder colaborar ahora con el sector público en la búsqueda de un esquema de contratación favorable para la PYME.

De entrada, algunas iniciativas que sin duda se podrían adoptar para favorecer esta permeabilidad a más empresas de los contratos públicos durante los próximos años son las siguientes:

  • Convocatoria de contratos con número elevado de lotes y con limitación de presentación de ofertas a sólo un lote.
  • Prioridad a la contratación de servicios frente a la contratación de equipamiento con la doble justificación de que los servicios son lo que realmente aporta valor a los servicios públicos y que con ello además se facilita la participación de la PYME y la creación de empleo local.
  • Asignación por la SGAD de partidas presupuestarias finalistas para su gestión por los organismos públicos puesto que así la lógica de las adjudicaciones distribuida provocaría una mayor dispersión.
  • Reducción de garantías y habilitación por defecto de pagos anticipados (a buena cuenta) en los contratos públicos.

En fin, pocas veces nos vamos a ver en el sector público con una disponibilidad de créditos TIC tan elevada. Vamos a ver si somos capaces de emplearlos en mejorar los servicios públicos y al mismo tiempo en mejorar la situación de nuestro sector TIC.

 

Carlos Maza Frechín, Subdirector General de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones ,Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y miembro del Grupo de IT Digital de Autelsi.